Proyecto educativo contextualizado, que prepara a sus estudiantes para vivir en comunión y participación, insertos en una comuna de fuerte raigambre histórica, asociada a la protección de Nuestra Señora del Carmen, que la nutre en su vocación religiosa y misionera.
Es una comunidad abierta a la diversidad, que acoge a cada estudiante y a su familia, desde una mirada antropológica, que asume con enfoque inclusivo la singularidad de cada persona, que potencia y desarrolla la autonomía en el aprendizaje, la apertura al entorno, al universo y a la trascendencia, respetando los principios de no discriminación en relación a género, raza, religión, discapacidad cognitiva, niños(as) en situación sanitaria crítica, condición socioeconómica o situaciones de riesgo social.
La persona humana es el centro de nuestra tarea educativa y ésta concebida, desde la antropología cristiana como una “creación a imagen de Dios”, invitada a vivir las exigencias del Evangelio desde una opción de fe personal y comunitaria.
La educación entendida como un medio de transformación social: sello que nos exige ofrecer y promover una preparación académica y valórica que permita un análisis crítico de la realidad en que vivimos e impulse, en cada estudiante, su compromiso ciudadano en la construcción de una sociedad más justa y fraterna, desde una perspectiva crítica e intercultural.
La educación como un derecho que colabora en el proceso de formación de personas: lúcidas, críticas y propositivas en todos los ámbitos, comprometidas en la construcción de una sociedad más equitativa, sensibles a las problemáticas ecológicas y comprometidas con el cuidado del medio ambiente.
Clima de familia: Estilo educativo y relacional que la Institución Teresiana promueve y cultiva permanentemente al interior de nuestra Comunidad Educativa, como espacio propicio para la formación y vivencia de los valores y principios institucionales, que buscan ser irradiados a la vida familiar y al entorno social, como aporte y garantía de una buena convivencia.
Relación educadora: entre todas las personas de la comunidad, nexo que se nutre en la vocación y en la valoración de una relación educadora vincular, una pedagogía de la proximidad, indispensable como inicio y desarrollo de un proceso educativo de calidad.
Una Alianza Familia-Colegio que concibe la formación y acompañamiento de cada estudiante como un proceso de corresponsabilidad, con estrategias de trabajo conjunto que privilegian el diálogo como recurso esencial entre docentes y padres, para lograr los mejores aprendizajes en cada estudiante.
Un Colegio que, sustentado en valores humanos y cristianos, educa para la paz: desarrollando en cada estudiante las habilidades socioemocionales que le permitan afrontar la resolución de conflictos a través del diálogo y la búsqueda de consensos.
Educación comunitaria, impulsada por un equipo de profesionales y asistentes de la educación, comprometidos con la Propuesta Socioeducativa, motivados por la innovación pedagógica y en actualización permanente, con el objetivo de responder a las demandas curriculares y a la diversidad de estilos de aprendizaje de nuestros estudiantes.